viernes, 18 de agosto de 2017

Defender los derechos laborales se ha convertido en delito en el diario “La Jornada”

- Carmen Lira, directora de La Jornada, viola los derechos de sindicalización y agremiación de los trabajadores del medio que dirige. - El Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP), exige la inmediata reinstalación de los despedidos y el respeto de sus derechos laborales y sindicales.
En reunión de los trabajadores del diario “La Jornada” discuten  acciones para defenderse de los despidos injustificados y denuncias penales, represalia de la empresa por la reciente huelga que fue declarada “ilegal” e “inexistente”.

El despido injustificado de los integrantes del Comité Ejecutivo del Sindicato de Trabajadores de La Jornada (Sitrajor), Judith Calderón Gómez y Leonardo Mondragón Román, secretarios General y de Organización, respectivamente, por parte de Carmen Lira, directora del diario La Jornada, constituyen inadmisibles violaciones a los derechos humanos laborales de libre asociación y sindicalización, establecidos en la Constitución y en tratados internacionales. Además, los directivos de La Jornada y algunos incondicionales, interpusieron demandas penales en contra de los sindicalistas mencionados, en una abierta intimidación, que pretende enfrentar más a los trabajadores de ese medio informativo, y generar temor e incertidumbre entre quienes han defendido sus legítimos derechos laborales y sindicales, principalmente el de un salario digno y el derecho de huelga. Violando un acuerdo suscrito entre Desarrollo de Medios, S.A. de C. V., (DEMOS), empresa que edita La Jornada, y el Sitrajor -luego de que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje de la Ciudad de México (JLCACM) declarara inexistente la huelga iniciada por la mayoría de los trabajadores, el pasado 30 de junio- en el que se establece expresamente que no habría despidos ni se ejercerían, en contra de los trabajadores sindicalizados, represalias, la gerente de la empresa, Tania Paulina Olmos, y algunos subordinados, hicieron las demandas ante el ministerio público adscrito a la Fiscalía Central de Investigación para la Atención de Asuntos Especiales y Electorales, de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, bajo el expediente CI-FBJ/BJ-1/UI-1S7D/03464/07/2017. En una serie de acciones concertadas, que en los hechos constituyen intentos de amedrentamiento, también fue demandado judicialmente el hijo de la Secretaria General, Alejandro Caballero Calderón, quien ya fue citado a declarar, y según fuentes ministeriales otros tantos sindicalizados serán objeto de persecución penal. Ante ello, el Comité Ejecutivo del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP), exige a la empresa la inmediata reinstalación de los despedidos, el retiro de las acusaciones penales que ha hecho en contra de ellos, así como el respeto de sus derechos laborales y sindicales. De igual forma, esta organización gremial, condena que el diario La Jornada, en su intento de desmantelar el contrato colectivo de trabajo existente en ese medio informativo y desaparecer al sindicato, utilice de forma amañada el aparato de justicia en contra de los trabajadores sindicalizados, a los que trata como delincuentes. Asimismo, el SNRP juzga gravísimo que los directivos de La Jornada hayan echado a la calle y dejen sin empleo a trabajadores, en este caso Judith Calderón y Leonardo Mondragón, quienes lo único que hicieron fue reclamar sus derechos laborales y sindicales y la del conjunto de agremiados al Sitrajor. Es lamentable que, en vez del diálogo, como establece el contrato colectivo de trabajo, la empresa recurra a la represión.
En reunión de los trabajadores del diario “La Jornada” discuten  acciones para defenderse de los despidos injustificados y denuncias penales, represalia de la empresa por la reciente huelga que fue declarada “ilegal” e “inexistente”.
El Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa da su total respaldo y apoyo a los secretarios General, Judith Calderón, y de Organización, Leonardo Mondragón, en la defensa de sus derechos laborales y sindicales. La huelga estalló en La Jornada, debido a que desde enero de este año la empresa de manera unilateral decidió sólo pagar a los trabajadores su salario y vales de despensa, negando la totalidad de las prestaciones establecidas en el contrato de trabajo vigente, con lo que el ingreso de más de 230 trabajadores fue reducido entre 29 y 45 por ciento.

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